La mitad de los profesionales de seguridad no tenían un plan de contingencia para Covid-19
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La seguridad ha sido una gran preocupación tanto para las empresas como para las personas, porque muchos empleados continúan trabajando desde casa, y muchos no se encuentran preparados para el impacto que el COVID-19 ha tenido. En una nueva investigación realizada por Bitdefender encontró que la mitad de los profesionales de seguridad informática (50%) no tenían un plan de contingencia para COVID-19 o un escenario similar. El informe presenta datos interesantes que el Canal de Distribución puede considerara como argumentos de venta, para lograr mayor atención y mejores resultados al ofrecer soluciones de ciberseguridad a sus clientes.
La sección – “El Impacto Indeleble de COVID-19 en la Ciberseguridad” – detalla las presiones que enfrentaron los profesionales de ciberseguridad durante COVID-19.
La falta de planificación anticipada ha tenido un gran riesgo, porque el 86% de los profesionales de ciberseguridad admitió que los ataques han aumentado durante el COVID-19. La investigación encontró que la guerra cibernética y el IoT como centro de ataque aumentaron en un 38%, y las APT (Advanced Persistent Threat), el robo de propiedad intelectual y las amenazas de redes sociales/chatbots en un 37%, lo que podría ser un indicador de un año destacado en vulneraciones.
Los profesionales de ciberseguridad también informan que, en su opinión, ataques de phishing a directores ejecutivos (26%), ransomware (22%), amenazas de redes sociales/chatbots (21%), guerra cibernética (20%), troyanos (20%) y ataques a la cadena de suministro (19%), han aumentado durante la pandemia. Según los encuestados, creen que el ransomware aumentó un 31% y los ataques DDoS un 36%.
Aunque todas las industrias están expuestas al cibercrimen, los encuestados revelaron que consideran que los servicios financieros (43%), la atención médica (incluida la telemedicina) 34% y el sector público (29%) son los sectores más afectados por el aumento en los ataques de ciberseguridad durante COVID-19.
La investigación revela también que las áreas de seguridad ya han visto algunas mejoras a raíz de COVID-19, así como los tipos de cambios en las infraestructuras de seguridad que los participantes quieren continuar implementando una vez que termine esta pandemia. Como resultado del aumento del trabajo remoto, uno de cada cinco profesionales de ciberseguridad (22%) revela que ya comenzaron a proporcionar VPN y realizaron cambios en la duración de las sesiones de VPN. Un grupo similar (20%) también ha compartido guías completas sobre seguridad cibernética y trabajo desde casa, y aplicaciones y filtros de contenido pre aprobados con empleados, y el 19% ha actualizado la capacitación en seguridad cibernética de los empleados. Sin embargo, a pesar de sus temores de un aumento en los ataques, solo el 14% ha invertido una cantidad significativa de dinero en la mejora de sus sistemas de seguridad, el 12% ha comprado un seguro de seguridad cibernética adicional y solo el 11% ha implementado una política de control de acceso a la red, lo que indica que aún quedan muchos cambios por hacer.
NOTA DEL DIRECTOR
Y esta situación nos lleva a confirmar nuevamente la oportunidad que existe para seguir desarrollando, como Canal reseller o integrador, la línea de negocio con portafolios cada vez más eficientes y escalables para demostrarles a sus clientes como la asignación de un presupuesto a la mejora en sus sistemas y equipamiento con mejor seguridad le permite la tranquilidad y la ausencia de interrupciones que favorece la productividad, la innovación y la creatividad. De esta manera podremos seguir avanzando en el logro de un criterio preventivo de parte del usuario final, sus clientes, ante las eventualidades para evitar riesgos innecesarios y puedan desarrollar sin contratiempos sus planes de negocio o de trabajo.
