Furukawa: La Industria 4.0: creando productos y experiencias más personalizadas
¿De qué hablamos cuando mencionamos la industria 4.0? ¿Conoce la Cuarta Revolución Industrial? Pues ambos conceptos son lo mismo y se relacionan ni más ni menos que con los avances actuales en tecnología, que se integran en la vida de las personas y las organizaciones.
Si hacemos un poco de memoria, la Revolución Industrial, denominada también la Primera Revolución Industrial, se desarrolló en la segunda mitad del siglo XVIII, y varios la recuerdan por la aparición de las máquinas a vapor; ahora, nuestra máquina de vapor del siglo XXI la conforman tecnologías como el Cloud, el Internet de las Cosas, la Inteligencia Artificial, entre otras.
Incluso la Impresión en 3D está relacionada con ella, y eso sin considerar todas las aplicaciones que puedan devenir de estas tecnologías. ¿Se imagina imprimir su ropa directo en casa? Bueno, este tipo de ideas ya no será tan ciencia ficción en el futuro, y tendrá impacto en las organizaciones y fábricas que deberán adecuarse a la realidad.
En América Latina aún no se percibe pero ya puede elegir un auto y personalizarlo a gusto directamente con la empresa que lo fabrica, quien verá directamente con su proveedor lo que requiere para ello y solo tendrá que esperar en casa a que llegue.
Esta personalización de productos abrirá oportunidades y nichos que las empresas comenzarán a explorar, pero para ello deberán realizar cambios porque la conexión on-line directamente para la industria demanda mucha información para que el cliente tenga la experiencia real del producto que está eligiendo. Es necesaria una red de datos robusta que conecte directamente con la de robots y otras máquinas, automatizando desde la producción hasta el despacho de los productos, casi sin intervención humana.
Las empresas empiezan a ver que las tecnologías de la información y las operativas confluyen al interior de su organización, haciéndose necesaria una integración y una nueva infraestructura de comunicaciones, que no solo tenga mejores capacidades para transmitir un alto volumen de datos en forma confiable y creciente, sino que además soporte los desafíos propios de los entornos industriales.
En ese contexto la Infraestructura Óptica se ha ido convirtiendo en una apuesta clave en la era de la Revolución 4.0. Esto es especialmente visible en las redes Ethernet, donde la tendencia a llevar la Fibra no solo hasta los sectores productivos sino también “hasta el escritorio” se ha ido masificando, generando una convergencia digital en las corporaciones.
Las redes de comunicaciones de Fibra Óptica son la columna vertebral y la base que soporta esta Revolución de la Industria 4.0, pues son el medio físico que trae los mejores beneficios: no sufren o generan ruidos electromagnéticos, tienen dimensiones reducidas, son robustas y seguras.
¿Exigirá mucho a las empresas este cambio? Dentro de las inversiones en infraestructura, como en este caso es la Fibra, representa solo el 7 % del total, mientras es el elemento con un mayor horizonte de durabilidad. Un punto que no podemos olvidar es que para tener lo mejor de la Fibra óptica es necesario tener apoyo del experto en este rubro y ahí estamos como Furukawa.
Como clientes las máquinas inteligentes ayudarán a que las empresas conozcan más y mejor, y entreguen mejores experiencias con productos y servicios altamente personalizados; mientras que como trabajadores nos ayudarán a que nuestras labores sean más creativas e intelectuales, lo que plantea fuertes desafíos educativos para nuestros países.
