Futuro de los Dispositivos de Computación personal
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Arquitecto de Soluciones TIC
El escenario por partes
Dispositivos de Computación Personal
Cabe la posibilidad de revisar conceptos arraigados en la historia de la informática y modernizarlos poco a poco hasta adecuarlos a la siempre cambiante realidad del rubro.
Si bien es cierto, las primeras computadoras personales eran precisamente eso: Instrumentos computacionales para un solo usuario, lo cierto es que llegaron a su pico en capacidad y versatilidad en las computadoras llamadas “Estaciones de Trabajo Profesionales” o “Professional Workstations”, las cuales se usaron masivamente en la industria como terminales de diseño CAD CAM, producción de fotografía y video, análisis de diagnóstico por imágenes, percepción espacial (o percepción remota), investigación científica, prospección petrolera y muchas otras actividades en las cuales, el computador personal en sitio, proporcionaba los resultados y entregables a diversas necesidades profesionales.
Con el desarrollo de las comunicaciones, estas súper computadoras personales, crecieron en capacidad de almacenamiento y comunicaciones. A pesar de haber crecido también en capacidad de procesamiento, muchas de las actividades focales mencionadas, cambiaron al modelo cliente-servidor, de manera que, por ejemplo, en la prospección petrolera, los datos de análisis sísmico, se acumulaban en un computador de sitio, luego se conectaba el sitio a un servicio de datos satelital, se “subían” los datos a un sitio central con un súper computador especializado y se procesaban allí.
Con el acceso a servicios de telecomunicaciones más eficientes y confiables, la potencia de los computadores personales de sitio, empezó a declinar en favor de nuevas tecnologías de sistemas, por ejemplo, las aplicaciones basadas en interface web, donde evidentemente, los principales factores de valor eran la estabilidad de la conectividad, la autonomía eléctrica y la portabilidad. Los servicios en nube no son sino una variación sutil del escenario de aplicaciones web, claro está, desde el punto de vista del terminal del usuario.
Las aplicaciones de nicho siguen usando computadoras personales de alta gama, sin embargo, este es un mercado en franca reducción y de difícil pronóstico, por lo que nos enfocaremos en los equipos que por lo menos están al alcance de estudiantes, profesionales independientes y toda clase de empresas, incluyendo las trasnacionales. Una breve reflexión nos ayudará a comprender que este camino es el que siguen también los monitores especializados, a excepción de un segmento de mercado que trataremos brevemente aparte: El mercado dedicado a los “gamers”.

Las computadoras de alta capacidad para el entretenimiento, específicamente, para juegos, representan un nicho completamente separado de la corriente central en cuanto a computadoras personales se refiere. En este mismo segmento se encuentran los monitores de altas prestaciones, alta resolución y alta velocidad de respuesta, formando un nicho de mercado en el cual no pocos fabricantes han tratado de ingresar con computadoras portátiles. El éxito no ha sido el deseado definitivamente, pero la innovación y la portabilidad pueden revertir esta tendencia y eventualmente, ganarle segmento de mercado al desktop de juegos, cuya principal virtud es la modularidad, lo que le da al gamer la libertad de elegir los componentes que considere más apropiados para su segmento y estilo de juego.
Fuera de este contexto, vemos la clara tendencia de que el computador de escritorio empresarial o incluso personal, se mueve rápidamente hacia el portátil, lo que se explica por que las prestaciones reducidas de estos equipos van de la mano con reducciones de precio significativas. Estas reducciones se acentúan por el número de marcas que compiten en el mercado local, incluyendo marcas nacionales, por cierto.
El mercado de las tablets sigue desarrollándose y penetrando nichos educacionales importantes en razón de la reducción de costos y la aparición de herramientas de gestión masiva de dispositivos, sin embargo, los costos de la miniaturización de componentes y baterías, hacen que muchas tablets de alta gama cuesten incluso más que un computador portátil de prestaciones medias.
Las tablets de mayor masificación pertenecen al sector de aplicaciones libres y de fácil integración con manejadores de contenidos. Las tablets de alta gama, siguen siendo un importante asistente empresarial, compitiendo con el celular de alta gama por la atención del usuario VIP, batalla que probablemente perderá por razones culturales más que técnicas.
Dentro del desarrollo tecnológico del televisor inteligente, es ya muy difícil separarlo de cualquier dispositivo de computación personal, en especial en el caso de Android TV. Es en este preciso punto donde podemos atrevernos a cambiarle el nombre a los dispositivos de computación personal y proponer de manera arbitraria y atrevida, llamarlos en adelante “Dispositivos de Conectividad Personal” o “DCP” (“Personal Connectivity Devices” o “PCD” antes que se copien la idea)
Sin pretender ignorar que existen usos “off-line” para diversos “DCP”, vale la pena resaltar que hoy en día, no podemos hablar de dispositivos “desconectados”, incluso si pensamos solo en las actualizaciones (Sistemas Operativos, Parches de Seguridad, Actualización de Aplicaciones, Etc. Etc.) ya no es posible considerar un dispositivo personal aislado.

¿Dónde quedarían nuestros correos electrónicos, nuestros chats, nuestras fotografías familiares, nuestros bancos, nuestras video conferencias y nuestras aplicaciones de trabajo, nuestras reservas aéreas, nuestro taxi sin conectividad? Ciertamente no es posible concebir la vida moderna sin conectividad personal.
En un buffet tecnológico donde cada comensal se sirve lo que quiere y en la cantidad que quiere, es imposible diferenciar, excepto artificialmente, cuál es el mejor “DCP” para cada caso. La pregunta inversa sería “¿Qué es lo que no podemos hacer en una computadora que no podemos hacer en cualquier otro DCP?”. La verdad es que muy pocas cosas.
No hace falta una pandemia para darse cuenta
Efectivamente, con el advenimiento de la pandemia causada por el virus SARS-Cov2, las restricciones para operar han afectado severamente a todos los integradores en general. Unos pocos han seguido operando de forma limitada al atender “servicios indispensables” pero el grueso de integradores no ha tenido tanta suerte.
Con la apertura de las operaciones de delivery, así como el servicio técnico on site, los integradores tienen la oportunidad de apalancarse en los “DCP” para mantenerse conectados y coordinados con su fuerza laboral. Algunos empleados podrán regresar de manera limitada a sus centros de labores, pero el grueso de ellos tendrá que trabajar a través de sus DCP, incluso para brindar servicios complejos a sus clientes corporativos.
Buenas prácticas corporativas
Dos elementos clave resaltan en el plan de uso de los DCP para las empresas e integradores: El aseguramiento de la identidad del usuario y el aseguramiento del propio dispositivo. Esto puede verse de varias maneras, sin embargo, la más simple y rápida es adicionar control de identidad y autenticación de múltiples factores al familiar concepto de BYOD, bastante conocido a nivel de integradores y empresas.
Un elemento adicional importante para el trabajo desde cualquier sitio, es el control de tiempos y cómo va a cambiar con el trabajo desde cualquier lugar. Aquí, tenemos desde aplicaciones estructuradas de control de tiempo hasta sistemas integrados para el control de objetivos en el tiempo. A elegir el que más le guste y se adecue a la empresa, sus metas y presupuestos.
¿Y dónde está el negocio?
Evidentemente, todas las empresas que se enfrenten a la gran caída del PBI de 3.5% aproximadamente, han tenido un primer trimestre terrible. Las perspectivas de recuperación se proyectan de manera optimista hacia finales del 2021, pero condicionadas a que se disponga de una vacuna segura a fines del 2020.
Mientras tanto, las fuerzas laborales se dividen en estructurales y variables. Las estructurales, probablemente tengan que asistir de manera alternada a sus centros de trabajo, mientras que las variables, por ejemplo, preventa, ventas, implementaciones y soporte técnico, tendrán que hacerlo a través de sus DCP, excepto cuando sea indispensable su presencia en la empresa.
Algunos componentes de las comunicaciones y TI empresariales van a requerir una revisión y renovación importante, por citar sólo algunos ejemplos: la capacidad de las VPN, pensadas para las directivas y ocasionales trabajadores viajeros, tendrán que redimensionarse para atender en teoría, a toda la empresa. Por otro lado, las empresas que aún proporcionan computadoras de escritorio a sus empleados, deberán considerar cambiarlas a portátiles para los casos en que el empleado requiera trabajar fuera de la empresa de manera alternada. En el caso de los empleados que decidan usar sus propias computadoras para trabajar desde casa, la empresa deberá proporcionarles la seguridad e identidad necesarias para que se adecuen a las normas de la empresa.
En estos tres ejemplos, los integradores tienen muchísimo trabajo por delante, considerando que no todas las empresas se adecuarán al mismo tiempo, por que sus actividades aún no se autorizan o por que han considerado modificar su modus operandi, Etc. Etc.
Naturalmente, no faltarán los casos en los que hagan falta otros elementos en las oficinas caseras de los empleados y posiblemente se tengan que implementar servicios de impresión, proveerles de monitores, teclados y mouses, sistemas de energía ininterrumpida o UPS, o incluso una pequeña red eléctrica protegida si fuera necesaria.
Todas estas implementaciones fuera de presupuesto y en medio de una crisis global, harán que los integradores luchen por obtener la mayor cantidad de contratos empresariales o personales que puedan.
La vuelta a las operaciones por delivery de los mayoristas, ayudará a aliviar en buena forma la escasez de componentes y equipos que agobian al mercado TIC desde el inicio de la cuarentena.